Mitos y realidades del Sendero Guayabal

Iniciamos nuestro 2020 con la excursión más esperada: El Sendero Guayabal. Por esta razón se hace propicio compartir algunas informaciones sobre los mitos y realidades que suelen comentarse sobre este espectacular sendero.


1. Al cruzar el río tengo que quitarme los tenis: Mito

El sendero va paralelo al Río Guayabal y se cruza más de 60 veces. Quitarte los tenis para cruzar no es práctico. Ve preparado para mojar los tenis y seguir caminando. El día completo estaremos chapoteando en el agua.


2. Como son muchos kilómetros, hay que ir bien rápido: Mito

La magia de los senderos sucede en los senderos mismos. Este, en particular, tiene innumerables atractivos que si vas de prisa puedes no verlos. Es importante ir despacio para disfrutar cada arroyo, cada pozo, cada vista, cada paisaje.


3. El sendero llega hasta Valle Nuevo: Realidad

El Parque Nacional Valle Nuevo es inmenso e incluye zonas en las provincias La Vega, Ocoa y Azua. Es tan grande que el Sendero Guayabal lo atraviesa, permitiéndonos disfrutar de la transición del bosque seco, característico de Azua, hasta el bosque templado, característico de las montañas de Constanza.


4. En nuestro recorrido llegaremos hasta Constanza: Mito

El Sendero Guayabal es un trillo que inicia en el pueblo Guayabal y puede conectar con una carretera de tierra que llega hasta Constanza. Sin embargo nuestro recorrido no es hasta allá. Caminaremos por dos días sobre el trillo hasta nuestro segundo campamento y, desde ahí, el tercer día, retornaremos hacia el pueblo Guayabal por el mismo camino.

No te quedes en casa y aprovecha el único feriado del mes de enero para conocer el sendero más hermoso de la República Dominicana. Ven y acampa con nosotros. #AcamparEsFacil

Próximas Actividades


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Los 10 equipos esenciales para toda excursión

Sendero Suave, Baños en el Río y Temperaturas Bajas: Arroyo Bonito el 11 y 12 de mayo del 2024

Cómo recuperarse después de la excursión: picadas de mayes y jejenes