Por qué hacemos backpacking

El backpacking, o andar de mochilero, es una manera de hacer campismo en la cuál visitas una zona apartada, a la que se llega sólo caminando, y llevas en tu mochila todo lo que necesitas para tu estadía y trayecto en el sendero. Para nosotros, en Patas Sucias, hay dos razones fundamentales para que este sea el modelo de nuestras excursiones: el desarrollo humano y la preservación del medio ambiente.


El backpacking desarrolla las fortalezas de las personas porque crea las condiciones para poner a prueba aspectos fundamentales de nuestro ser. Nos hace planificar nuestra experiencia; nos pone a enfrentar obstáculos y a superar los retos utilizando nuestras propias capacidades; nos enseña del fracaso y a levantarnos cuando nos hemos caído; y nos enseña a ser responsables por nuestras decisiones y a ocuparnos de nosotros mismos.


 Existen abundantes estudios y evidencias que demuestran lo mucho que se desarrollan nuestras competencias blandas, y las duras también, cuando practicamos el campismo autónomo. Nos hace madurar, porque nos pone en la posición de ser responsables de nosotros mismos y de darnos cuenta, porque a veces se nos olvida, de que nosotros podemos sustentarnos por nuestros propios medios. Es siempre una oportunidad de aprendizaje donde la montaña, el medio ambiente, se encarga de ser la maestra.


Por otro lado, está la preservación del medio ambiente. Para esto nos apoyamos en los Principios de No Dejar Rastro, que son los lineamientos y recomendaciones generales que nos permiten visitar los entornos naturales causando el menor impacto posible.


El mecanismo por el que esto funciona es que, como tenemos que ser responsables por lo que llevamos a los entornos naturales, y sólo podemos llevar aquello que cabe en nuestras mochilas y que podemos cargar, el impacto general de nuestra visita se reduce. En esencia, cuando hacemos backpacking:
  1. Llevamos menos equipos y objetos a los entornos naturales, ya que sólo va lo que podemos cargar.
  2. Eliminamos el impacto de especies invasoras, como los mulos y animales de carga, ya que no los utilizamos.
  3. Somos más conscientes de nuestros desperdicios, ya que nadie está para cargarlos o sacarlos por nosotros.
  4. Minimizamos el uso de las fogatas, ya que no dependemos de ellas para cocinar.

El backpacking es una actividad hermosa que puede ser practicada por toda persona. Para hacerlo, simplemente, hay que tener un profundo amor por la naturaleza y aprender las técnicas apropiadas. Como todo en la vida, una vez que lo aprendes y avanzas en tu capacidad para ser autónomo, jamás miras atrás. Si todavía no has hecho backpacking, ven y aprende con nosotros. #NosotrosAcampamos

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